La personalidad psicopática es considerada un trastorno de personalidad proclive o con tendencia a cometer actos delictivos o violentos. Es así que la escala PCL-R, desarrollada por Robert Hare, es uno de los instrumentos más habituales para medir psicopatía en individuos o tendencias antisociales. En la comunidad científica, existe consenso respecto a su efectividad, dado que es uno de los mejores predictores de comportamiento violento desde un punto de vista clínico y forense. Actualmente, existe suficiente evidencia empírica para respaldar su uso con población penal, tanto con población adolescente como con población adulta, ya que el instrumento ha sido adaptado y validado en distintos países. Por estas razones, en este artículo buscaremos describir las posibles correlaciones entre la escala PCL- R de Robert Hare con otras pruebas proyectivas como el MMPI y el test de Rorschach.

El MMPI (Multiphasic Personality Inventory) es un instrumento bastante utilizado por psicólogos clínicos para evaluar la personalidad, para identificar alteraciones psicosomáticas y para identificar a personas con rasgos psicopáticos. Las escalas Pd (desviación psicopática) y Ma (hipomanía) del MMPI tienen como finalidad evaluar de manera objetiva las dimensiones de la personalidad relacionadas con la adaptación personal y social del individuo. La escala Pd consta de 50 ítems que buscan medir un desorden psicopático de personalidad, por lo que evalúa la ausencia de una respuesta emocional profunda y la irrupción de las normas sociales establecidas. La escala Ma hace referencia a un grado menor de manía y mide la acción del pensamiento, por lo que un elevado puntaje en esta escala también podría indicar cierto nivel de psicopatía en la persona evaluada.

En esta misma línea, otro artículo de Jorge O. Folino y Gastón Mendicoa publicado en la Revista Argentina de Clínica Neuropsiquiátrica sobre la Psicopatía, el MMPI y la Hare PCL- R, indica que existen correlaciones estadísticamente significativas entre las escalas Pd y las escalas Ma con la puntuación total del PCL-R. El método de estudio consistió en evaluar a 30 jóvenes con la escala PCL-R que cumplían cadena judicial en el servicio penitenciario de Santa Cruz, Argentina, y se les administró el MMPI-II para luego elaborar su perfil tras haber completado previamente la escala PCL-R. A su vez, elaborando un modelo de regresión logística se observa que una combinación de las escalas del MMPI-II pronostica una gran mayoría de los casos de psicopatía diagnosticados con la escala PCL-R, lo cual también apoya la validez concurrente de la PLC-R con el MMPI. Por este motivo, resulta interesante complementar ambos instrumentos para contrastar y relacionar la información obtenida, permitiendo al terapeuta obtener mayor solidez al diagnosticar, pronosticar y planificar.

Los test proyectivos ofrecen una serie de estímulos no estructurados y ambiguos que la persona evaluada interpretas según su funcionamiento cognitivo, según sus motivaciones, sus necesidades, sus actitudes y según sus modos de adaptación al medio. Es por esto que el Test de Rorschach es un instrumento bastante utilizado para medir psicopatía, que puede ser identificada mediante impulsividad en las respuestas, egocentrismo, inmadurez, escasos sentimientos de culpa y por una necesidad de estimulación. En una investigación realizada por Cristina Fernández para medir psicopatía en población drogodependiente, se utilizaron tres instrumentos para medir psicopatía; la escala PCL-R, el Test de Rorschach y una entrevista clínica. Los resultados indicaron que los participantes drogodependientes con psicopatía presentan niveles ausentes o mínimos de ansiedad, poseen dificultades en la vinculación afectiva, un desapego emocional crónico y una escasa capacidad para establecer relaciones cercanas. Asimismo, se hallaron déficits en la capacidad cognitiva, impulsividad y una disminución del sufrimiento psíquico.

En síntesis, se observa que estos instrumentos suelen ser empleados en conjunto para evaluar psicopatía en las personas, dado que cada uno de ellos brinda información distinta que puede enriquecer los resultados obtenidos por cada instrumento, como también para obtener una mayor solidez al momento de planificar y llevar a cabo un tratamiento adecuado. Las conclusiones indican que el Rorschach es un excelente complemento para la escala PCL-R, dado que el test añade información sobre la personalidad de la persona y su funcionamiento, a diferencia del PCL-R. Asimismo, la escala PCL-R presenta una correlación estadísticamente significativa entre las escalas Pd y Ma con el puntaje total obtenido en la escala PCL-R, por lo que resulta idóneo combinar la aplicación de estos instrumentos al indagar sobre un posible comportamiento psicopático, obteniendo información que permite enriquecer el diagnóstico de los individuos evaluados.

Referencias